Domingo 1 de enero del 2006
Hoy empezó un nuevo año.
Anoche recibimos el año aquí en la casa.
En la mañana fui con Mónica a Potrero Chico de Hidalgo, N.L.
Hace rato estaba leyendo una revista de National Geographic y en un artículo sobre el budismo dice: "La causa del sufrimiento es el apego a las cosas. Al suprimir la causa -el apego- se puede eliminar el sufrimiento".
Es tan fácil decirlo.
Cada que comienza un nuevo año, es como una nueva oportunidad, un libro en blanco, etc.
Se hacen los propósitos de año nuevo que a los pocos días se olvidan porque la vida sigue y cuando pasan los años un cambio de año es como cualquier cosa, son fechas, tradiciones que la gente sigue, como comer doce uvas o usar calzones rojos y amarillos.
Este año 2006 se esperan muchas cosas, se espera, bueno, yo espero que gane López Obrador la presidencia de México.
Voy a leer más y a escribir más.
Me gustaría viajar aquí cerca y escribir de estos paseos.
No se necesita que cambie el año para hacer cosas, simplemente vivir y dejar atrás lo que ya no sirve, lo que hace daño y aceptar que hay cosas que no se pueden cambiar.
Sale el sol y se mete
llueve y se hace zoquete.
1 comentario:
Si. Recuerdo que ese día Magda nos impresionó a todos ( a tí, tus hijos y a mí. ) con su extrema energía. El potrero estaba cerrado y se brincó la barda para ir al baño. Yo tenía mucho miedo de que la fueran a ver y a llamar la atención.
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